Tras unas pequeñas vacaciones durante el mes de Agosto hemos vuelto al monte. Y lo hemos hecho pasando un frío horroso, con un viento horrible y sin realizar la actividad que teníamos en mente. La predicción de meteo para este martes era bastante decente, pero se retrasó unas horas la llegada del buen tiempo y nos vimos obligados a desechar los planes iniciales y ascender el pico Perdiguero para no volver de vacío.
Pasamos una noche bastante durilla metidos en la tienda en el ibón superior de Literola con la intención de hacer la cresta del Crabioules-Lezat, pero al despertarnos por la mañana el panorama era desolador, viento, mucho viento, frío, mucho frío, niebla, mucha niebla así que lo más sensato fue ascender al Perdiguero por su vía normal y dejar para otra ocasión la cresta.
Ya en el descenso del pico el día fue mejorando muchísimo, pero ya era tarde para escalar. La cresta sigue ahí y volveremos seguro.
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